¡Paciencia y Recompensa!

Porque la paciencia os es necesaria; para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa . (Hebreos 10:36)

Si usted viene a Jesús por dinero o prosperidad o por cualquier otra razón que no sea su Santa Voluntad;  y si ademas cree que pagando obtendrá lo que desea o le prometen, usted está viniendo por las razones equivocadas. Es una falsa y mala decisión, es una falsa conversión. No existe un evangelio de prosperidad, o un evangelio social. No hay adjetivos para el Evangelio. Si usted le agrega un adjetivo al Evangelio, obtiene un evangelio diferente, un falso evangelio(Deuteronomio 4:2, Galatas 1:6-9, Apocalipsis 22:18-19).

Hoy día, muchos que se dicen cristianos(de corazón o no) pretenden comprar el favor de Dios con dinero. Ya sea por ignorancia Bíblica, porque se los dicen o enseñan, o por como la gran mayoría: ¡Por Avaricia!  

Lo anterior me hizo recordar al personaje bíblico: "Simón el mago" 

"Y como vió Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo, les ofreció dinero, diciendo: Dadme también á mí esta potestad, que á cualquiera que pusiere las manos encima, reciba el Espíritu Santo. Entonces Pedro le dijo: Tu dinero perezca contigo, que piensas que el don de Dios se gane por dinero. No tienes tú parte ni suerte en este negocio; porque tu corazón no es recto delante de Dios." (Hechos 8:18-21)

El desespero en la necesidad, en la angustia, en la prueba, en la enfermedad, etc., nos lleva muchas veces a cometer errores(delante de Dios) que, la mayoría de las veces suelen ser reversibles(en el evento de que tu arrepentimiento, delante de Dios, sea genuino según Su criterio), pero que muchas otras veces traen consecuencias negativas.

Buscar la ayuda en el sitio equivocado(sectas, religiones, brujos, etc.), y poner tu confianza en el hombre(pastores, falsos profetas y apóstoles, etc), en lugar de Dios, no hace mas que hundirte en el pozo de barro que tu mismo cavaste.

Somos seres humanos(Dios lo sabe), y como tales no estamos excentos de cometer errores, ni pecados. Ese no es el punto, el punto es: ¿En quien colocamos nuestra confianza(fe)? ¿Somos pacientes? ¿Somos merecedores de la promesa o bendición que queremos(que es distinta de la que necesitamos)? ¿Cuales son las promesas de Dios? ¿Cual es la promesa de Dios para mi? ¿Las promesas de Dios son condicionadas?

Por algo Abraham es el padre de la fe:

"Porque prometiendo Dios á Abraham, no pudiendo jurar por otro mayor, juró por sí mismo, diciendo: De cierto te bendeciré bendiciendo, y multiplicando te multiplicaré. Y así, esperando con largura de ánimo, alcanzó la promesa." (Hebreos 6:13-15)

Antes de que, aprendamos como y porque se obtienen las promesas de Dios, y tratemos de resolver las interrogantes anteriores; contextualicemos el porque debemos ser pacientes para obtenerlas:

"Por tanto os digo: No os congojéis por vuestra vida, qué habéis de comer, ó que habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir: ¿no es la vida más que el alimento, y el cuerpo que el vestido? Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni allegan en alfolíes; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No sois vosotros mucho mejores que ellas? ¿Mas ¿quién de vosotros podrá, congojándose, añadir á su estatura un codo? Y por el vestido ¿por qué os congojáis? Reparad los lirios del campo, cómo crecen; no trabajan ni hilan; Mas os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria fué vestido así como uno de ellos. Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana es echada en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más á vosotros, hombres de poca fe? No os congojéis pues, diciendo: ¿Qué comeremos, ó qué beberemos, ó con qué nos cubriremos? Porque los Gentiles buscan todas estas cosas: que vuestro Padre celestial sabe que de todas estas cosas habéis menester." (Mateo 6:25-32)

Dios, en su Palabra, literalmente hace cientos de promesas. ¿Cómo podemos saber cuáles promesas se aplican a nosotros y cuáles promesas podemos reclamar? Para enmarcar esta pregunta de otra forma, ¿cómo se puede saber la diferencia entre las promesas generales y las promesas específicas? La promesa general es aquella que el Espíritu Santo da a cada creyente en particular en cada época. Cuando estas promesas fueron escritas, no se establecieron limitaciones de tiempo o destinatario.

Un ejemplo de una promesa general es: "Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad" (1 Juan 1:9). Esta promesa se basa en la naturaleza del perdón de Dios y está disponible a todos los creyentes de todo el mundo. Otro ejemplo de una promesa general es: "Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús" (Filipenses 4:7). Esta promesa se hace a todos los creyentes que, negándose a preocuparse, traen sus peticiones a Dios(Filipenses 4:6). En otros ejemplos de promesas generales se podrían incluir: Salmo 1:3; Juan 4:13-14 (observe la palabra "cualquiera"); y Apocalipsis 3:20.

Una promesa específica se hace a personas específicas en momentos específicos. El contexto de la promesa usualmente deja claro quién es el destinatario. Por ejemplo: "Yo afirmaré el trono de tu reino sobre Israel para siempre…" (1 Reyes 9:5). Los versículos anteriores y siguientes aclaran que Dios está hablando solamente al rey Salomón.

Mientras el apóstol Pablo era guiado para llevar el evangelio a los gentiles, él afirmó la promesa de Isaías: "Te he puesto para luz de los gentiles, A fin de que seas para salvación hasta lo último de la tierra" (Hechos 13:47). La promesa de Isaías fue originalmente para nuestro Señor Jesucristo, pero en ella Pablo descubrió la guía del Señor para su propia vida. 

Hay una gran diferencia entre la falsa predicción y la promesa. Una falsa predicción es solo eso, pero una promesa es algo seguro cuando viene de nuestro Dios. Las promesas no cumplidas, que nos hacen las personas, nos dejan heridas. Pero Dios jamás rompe sus promesas, pues estas nos dan certeza para vivir. "Jesús es el mismo ayer, hoy y por los siglos", es inmutable, igual que su Palabra. "Porque todas las promesas son en Él Sí, y en Él Amén", entonces hay fidelidad(2 Corintios 1:20). 

Hoy día, muchos que se dicen cristianos pretenden comprar el favor de Dios con dinero. Ya sea por ignorancia Bíblica, porque se los dicen o enseñan, o por como la gran mayoría: ¡Por Avaricia! 

Cuando reclamemos una de las promesas de Dios en las Escrituras, debemos tener en cuenta los siguientes principios:

1) Las promesas de Dios, en su mayoría, son condicionales(nunca en dinero, sino a la Obediencia). Busca la palabra "Si" en el contexto.

2) Dios nos da promesas para ayudarnos a someternos mejor a su voluntad y confiar en él. Una promesa no hace que Dios se doblegue a nuestra voluntad.

3) No asumas saber exactamente cuándo, dónde o cómo es que las promesas de Dios se cumplirán en tu vida.

4) No se compran con dinero.

También, ten en cuenta la Palabra:

"Lleguémonos con corazón verdadero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua limpia. Mantengamos firme la profesión de nuestra fe sin fluctuar; que fiel es el que prometió." (Hebreos 10:22-23)

Las promesas y bendiciones se obtienen, no comprándolas, sino haciendo la voluntad del Señor....y con paciencia, se obtiene la recompensa. 

"Por lo cual, también nosotros damos gracias á Dios sin cesar, de que habiendo recibido la palabra(promesa) de Dios que oísteis de nosotros, recibisteis no palabra(promesa) de hombres, sino según es en verdad, la palabra(promesa) de Dios, el cual obra en vosotros los que creísteis." (1 Tesalonicenses 2:13)

"Porque la paciencia os es necesaria; para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa ." (Hebreos 10:36)

Referencias: Biblia